Capítulo 10 :)

Narra Louis

Llegamos a Madrid y ya estábamos a punto de entrar por la puerta de embarque,  en la que supusimos, que  muchos fans estarían esperándonos. Oíamos gritos mientras nos íbamos acercando. Cuando pasamos por la puerta, las fans se volvieron locas, eso nos encantaba. Miré a Harry y ya tenía una gran sonrisa dibujada en la cara, al igual que todos, seguí para delante y vi a unas cuantas chicas disfrazadas de zanahorias que se estaban acercando a mí para hacerse una foto. Paul me puso mala cara, ya que nos decía siempre que sí nos hacemos fotos con una fan, nos tenemos que hacer con todas, y eso es imposible. Pero pasé un poco de él y me acerqué a las chicas. Se les veía muy contentas, muchas de ellas estaban a punto de llorar. Por eso Liam les gritó a lo lejos: “No lloréis chicas. Sois geniales”.

Narra Lidia

Los vi entrar por la puerta, automáticamente, nos volvimos locas. Intentamos acercarnos pero había una barrera que nos lo impedía, además de las cientos de fans que había delante nuestro. Hice miles de fotos, al igual que Marta y Helen.

Cuando salieron del aeropuerto, todas corrimos detrás de ellos intentando acercarnos lo máximo posible a ellos, pero había muchos fotógrafos rodeándolos. Se montaron en la furgoneta.

Me di la vuelta y vi que Helena estaba llorando, de la emoción, claro. Marta, de repente se giró y dijo anonada: Soy la chica más feliz del mundo!

Narra Marta

Llegamos a casa, Helena se vino con nosotras. Preparamos algo rápido de comer para llevárnoslo a la fila, ya que esta tarde era el concierto de los chicos. Dejamos una nota a papá en la nevera por si no se acordaba del concierto.

-Chicas, vamos rápido. Os llevo en mi coche!

Nos montamos, el trayecto se nos hizo corto cantando canciones de los chicos, y al fin, llegamos.

Éramos VIP y no teníamos casi que hacer fila, pero era inmensa, estaba llena de tiendas de campaña. Mientras esperábamos aburridas, todas las fans cantábamos sus canciones para afinar nuestras voces para el concierto.

Quedaban 30 minutos para que empezara y la cola empezó a moverse. Como teníamos esa entrada especial, nos apartaron y nos llevaron a una sala llena de chicas. Los nervios empezaban.